Escalofriante

30.03.2011 21:53

Lo siguiente que os voy a contar deja en braguitas cualquiera de mis relatos de terror, incluso el más abominable y gore que se me pudiese ocurrir parecería un cuento de Disney a su lado.

Hace unos días me llamó una empleada de la entidad bancaria en la que tenemos la hipoteca de la casa con la intención de ofrecerme un producto con el que podriamos reducir durante un tiempo la cuota que actualmente estamos pagando. Es decir, una carencia. Como la curiosidad es uno de mis defectos decidí ir a informarme puesto que si el "producto" es aceptable pues no viene mal en estos tiempos llegar más desahogaditos a fin de mes.

Como no es de buena educación hablar de cifras os lo voy a explicar de la siguiente manera. Hace ocho años les pedí a esos señores 120 monedas de oro, de las cuales les he devuelto 30 más los intereses correspondientes, pongamos que son monedas de cobre, una moneda de cobre por cada moneda de oro que les pedí. El trato que me ofrecen es el siguiente, durante los proximos tres años solo les daré las monedas de cobre y una moneda de oro en vez de las tres pactadas pero cuando acabe este no solo no habran contado las monedas de oro que les haya dado en ese tiempo sino que seran más de 100 las que les deba y las monedas de cobre serán el doble por lo tanto tendré que estar endeudada con ellos diez años más si quiero pagar despues de esos tres años una cuota más o menos parecida a la que estoy pagando ahora. Por supuesto todos los gastos derivados de la operación corren por mi cuenta y todas las condiciones que actualmente tengo cambiarian. Un ejemplo, el interes que tendria que pagar en caso de que me retrasara en el pago de una de esas monedas sería más del triple del que está establecido en este momento.

Afortunadamente no nos vemos en la obligación de aceptar este "pan para hoy, hambre para mañana" o como dirian otros menos sutiles este "atraco a mano armada" pero sinceramente me compadezco de quienes no tengan otro remedio que pasar por el aro y aceptar estos abusos. No entiendo como es posible que nos sintamos orgullosos de tener una constitución en la que dice que todo ciudadano tiene derecho a una vivienda, esto no es nada más que papel mojado. En la practica si quieres un hogar donde vivir necesitas hipotecar media vida a unos usureros y morir lentamente, asfixiado en un trabajo que te da nauseas pero que no te queda otro remedio que aceptar puesto que si dejas de pagar te quedas en la calle y aún así tienes que seguirles pagando. Todo esto con el fin de que ellos puedan vivir la vida que tu te mereces y bailar sobre tu tumba cuando hayan conseguido su objetivo.

—————

Volver